Una gran familia
Cuando vine por primera vez a Confidentia, el edificio que ocupábamos en ese entonces era la mitad de lo que es ahora. Y por supuesto no había Santuario todavía.
Cuando vine por primera vez a Confidentia, el edificio que ocupábamos en ese entonces era la mitad de lo que es ahora. Y por supuesto no había Santuario todavía.